29 abr 2024

HOY HACE SEIS MESES. ELEGÍA POR DAVID.

EPITAFIO

Si te dicen que me he ido,
por mí no has de llorar.
Mi espíritu vivirá,
para siempre 
en mi música.
Mi corazón;
entre las olas de la mar.
 


Va pasando el tiempo

inexorablemente

te busco y yo te encuentro 

mas tú, presente no estás.


Siento y sufro 

tu obligada ausencia

lloro amargamente, 

añorando tu presencia.


Te fuiste aquel día 

pero sigues tú presente

en el vivir de los días, 

en mi alma y en mi mente.  


Presente en mis recuerdos, 

presente en mi futuro, 

presente en mi corazón, 

en mi alma que hoy sufre 

este terrible dolor

de solo poder tenerte

en esos dulces recuerdos,

en mi alma que llora 

amargamente,

dentro de mi corazón

sin yo poderte abrazar,

sin poder besar tu frente. 


Presente, tú hijo mío.

Tú siempre estarás presente

porque te hemos querido,

y te amaremos por siempre,

de aquí a la eternidad.


Tú un día te nos fuiste 

hoy ya hace los seis meses, 

y te fuiste para siempre.


Pero aunque no te veamos, 

tú nunca te nos has ido, 

tú vives hoy y por siempre, 

en nuestro vivir presente,

en el tiempo que ha pasado 

y en el futuro seguido.


Viven en mí tus recuerdos, 

en mi corazón y mi mente.


Vives en mi mirada 

que mira hacia el pasado 

y te trae hacia el presente.


Vives en mi dolor 

que arraigó para siempre

el día en que te fuiste 

y siempre estará latente

dentro de mi corazón

de mi alma y de mi mente.


Vives, mientras que te recordemos, 

que te hablemos cada día, 

que busquemos en los recuerdos 

de esos dulces momentos 

que junto hemos vividos.

 

Vives, mientras que te añoremos,

tú estarás con nosotros,

tú seguirás muy presente 

viviendo en el día a día

del pasado, del futuro

y en el vivir del ahora.

Que es, será para siempre, 

nuestro presente y futuro.


Tú cariño mío. Hijo mío del alma 

vivirás siempre conmigo 

mientras mi corazón lata

despacio pero seguido.



26 abr 2024

HABLANDO CON DAVID 2024-XXXVII

Me gustaría ser el sendero
por donde tus pies pisaran
y dejar en su terreno
tus huellas en él gravadas.
Para yo poder seguirte
y acompañar tus jornadas
y volver juntos hablar,
y contemplar yo tu cara
llena de esa gran ternura,

de la más linda dulzura,
de esa limpia mirada,
que tanto extraño yo.
 
Fue tan dolorosa perdida
la de tú obligada partida
que no podemos creernos
que tú no estás con nosotros, 

que tú; no vuelvas un día.
 
Me gustaría ser fuente
para ofrecerte el agua
que aplaca la sed,

el agua que da la vida.

Me gustaría ser la sombra

que en comunión con la brisa
refresquen el ardor

de los senderos

el sudor de tu rostro

y renueven tu sonrisa-

 

Me gustaría ser el guía
del camino en que tú andas
para caminar contigo
esas tan largas jornadas.
Hoy es tu triste destino,
la losa que nos aplasta

que aprisiona corazones

y que lastra nuestra alma.

Me gustaría tenerte
de nuevo en nuestra casa
para poderte abrazarte
besar de nuevo tu cara
y no tener que soñar
porque ya no haga falta.

 

Tú te has ido para siempre,

pero en nuestro corazones

nunca, aceptamos tu marcha.


 

22 abr 2024

HABLANDO CON DAVID 2024- XXXVI


Hola pequeño:
Sigo añorándote y no encuentro 
el suficiente consuelo 
para aceptar que te has ido, 
que te busco y no te encuentro 
si no lo es; 
en mis sueños y recuerdos a la vez.

Y aunque en ellos encuentro 
consuelo para aliviar mi pena.
yo quisiera tenerte siempre a mi vera
para abrazarte y hablarte,
celebrar tus alegrías
y aliviarte en tus penas.
Paso a contarte vivencias 
de hace solo unos momentos. 
Momento que hemos vividos
con tu hija cierto tiempo.
Tu hija es un tesoro 
que nos ha traído el cielo.
Cuanto bien hace tenerla 
con nosotros esos momentos.
¿Sabes que ya anda sola? 
Que es; más linda que un lucero.
Lista es; como ella sola.
Tiene personalidad y genio. 
Y no se deja engañar
con regalos y caricias
lisonjas y zalameos. 

Es; cariño tu pequeña.
es; por ella misma un cielo.
Sabes tú que a mí me gusta 
enojarla. 
Conmigo saca su genio, 
pero también su dulzura, 
sus caricias y sus besos.
Besos como lo son; los de su tío
y los de su padre fueron.
Besos que muy caros venden.
Pone ella su carita
para recibirlos a ellos.

No te puedes imaginar, 
lo muchos que yo la quiero.
apenas nos ha dejado 
y ya, la echamos de menos. 

Espero, que donde quieras que estés
no te pierdas ninguno 
de sus momentos.
Eso dice nuestra fe. 
Que tú siempre estas presente
aunque nadie a ti te ve.
Hijo mío, en ello quiero creer,
si no, no puedo entenderlo
la injusta que esta vida,
contigo lo pudo ser.

Hijo mío cada día
más te quiero 
y te añoro a la vez.