Sigo añorándote y no encuentro
el suficiente consuelo
para aceptar que te has ido,
que te busco y no te encuentro
si no lo es;
en mis sueños y recuerdos a la vez.
consuelo para aliviar mi pena.
yo quisiera tenerte siempre a mi vera
para abrazarte y hablarte,
celebrar tus alegrías
y aliviarte en tus penas.
de hace solo unos momentos.
Momento que hemos vividos
con tu hija cierto tiempo.
que nos ha traído el cielo.
Cuanto bien hace tenerla
con nosotros esos momentos.
Que es; más linda que un lucero.
Lista es; como ella sola.
Tiene personalidad y genio.
Y no se deja engañar
con regalos y caricias
lisonjas y zalameos.
Sabes tú que a mí me gusta
Conmigo saca su genio,
pero también su dulzura,
sus caricias y sus besos.
Besos como lo son; los de su tío
y los de su padre fueron.
Besos que muy caros venden.
Pone ella su carita
lo muchos que yo la quiero.
apenas nos ha dejado
y ya, la echamos de menos.
Espero, que donde quieras que estés
no te pierdas ninguno
Eso dice nuestra fe.
Que tú siempre estas presente
aunque nadie a ti te ve.
Hijo mío, en ello quiero creer,
si no, no puedo entenderlo
la injusta que esta vida,